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Cómo volver a la rutina y sobrevivir en el intento

Ha llegado el momento. El fin del verano se acerca, las vacaciones terminan y la llegada de septiembre es una realidad. ¿Y ahora qué? Es en este instante cuando nos preguntamos cómo volver a la rutina sin morir en el intento. ¿Cómo gestiono la vuelta? ¿Cuál es la mejor manera de retomar mis hábitos sin agobiarme? ¡Cuántos retos por delante! Por algo dicen que septiembre es un mes de nuevos propósitos.

Lo cierto es que todo es posible si tomamos conciencia y aprendemos a gestionar las cosas de la manera correcta. Si quieres descubrir cómo, sigue leyendo…

Emprender


En primer lugar, ¿qué es eso del síndrome postvacacional? No es, ni más ni menos, que el periodo de transición por el que pasa una persona cuando vuelve de vacaciones y tiene que retomar su día a día habitual.

Durante ese proceso, es frecuente sentir tristeza, apatía, ansiedad, falta de motivación y energía… ¿te suena?

Para intentar evitar que este síndrome se apodere de nosotros, te propongo algunas recomendaciones que puedes seguir para que aprendas cómo volver a la rutina sin que ello implique un cambio brusco de nuestro estado emocional. Pero ¡cuidado!, no creas que es una receta mágica. Es inevitable sentir nostalgia, cierto desánimo o falta de ganas, pero sí puedes intentar que esa transición sea lo más llevadera posible.
 

CUESTIÓN DE ACTITUD

Bien dicen que la actitud lo es todo… ¡pues es hora de demostrarlo!
Las vacaciones han estado muy bien, te has divertido, has desconectado, y muchas otras cosas. Pero lo bueno no dura eternamente, porque hasta de eso terminaríamos cansados. Mi recomendación es que intentes enfocarlo de forma objetiva. Reflexiona sobre aquellas metas que te gustaría alcanzar, mentalízate de que hay que volver a la rutina diaria y eso no tiene que ser necesariamente negativo. Piensa que si vuelves con una actitud positiva, la motivación será mayor y la vuelta será menos dramática.
Intenta mantener esta mentalidad ganadora cada día y verás cómo cada progreso te motiva mucho más que el día anterior.

RETOMA HÁBITOS Y AFICIONES

Todo no iba a ser malo, ¿no? La vuelta de las vacaciones también implica retomar aficiones y hábitos que nos hacen felices. Cada uno tiene los suyos, y si aún no tienes ninguno, piensa que puede ser un buen momento para encontrar una actividad que despeje nuestra mente. Leer, pasear, visitar museos, apuntarnos a algún curso,  etc.
Recuperar nuestras aficiones preferidas puede ayudarnos psicológicamente a que el proceso no sea tan cuesta arriba. Y por supuesto, puede ser un punto de partida para iniciar ese proyecto que tanta ilusión te hace.
Estos hábitos también implican mantener un buen ritmo de actividad, por ejemplo, practicando deporte para mejorar nuestras condiciones físicas tras el periodo vacacional. Otro aspecto que debemos valorar es el cuidado de la alimentación. El verano puede ser una época de excesos en ese aspecto, pero no olvides que también es bueno para nuestro organismo recuperar una dieta equilibrada, variada y saludable.

LA IMPORTANCIA DE LA PLANIFICACIÓN

Uno de los mejores consejos si tu intención es aprender cómo volver a la rutina sin volverte loco .Todos necesitamos un periodo de adaptación, y para ello una buena planificación puede resultar fundamental. 
Te recomiendo lo siguiente:
•    Implementa los cambios de forma gradual. No pretendas transformar tu vida en pocos días. Lo único que conseguirás es sentir frustración a corto plazo. Por ejemplo, empieza dejando huecos libres en tu día a día, y más adelante ve rellenando esos huecos con otras actividades.
•    Empieza fijando las tareas obligatorias y prioritarias y, a partir de ahí, clasifica el resto de tareas pendientes. Es muy importante que entre esas tareas también incluyas actividades de ocio que te hagan sentir bien, como visitar a un familiar, hacer planes con amigos o escapadas en pareja, etc.
•    Aplica realismo y sentido común, no intentes imposibles. Sé flexible y amable contigo mismo, y no te exijas demasiado. De lo contrario, sentirás más estrés.

DESCANSO DE CALIDAD

A la hora de volver a la rutina, uno de los aspectos que más nos cuesta es acostumbrarnos de nuevo a los horarios habituales. Y lo cierto es que un descanso en condiciones es imprescindible para nuestro rendimiento diario. Entra antes en la cama, intenta desconectar de aquello que te active, como jugar con el móvil o ver demasiado la tele, o realiza algún ritual que asocies con el momento del sueño, como estirar, tomar una infusión, escuchar música relajante, encender una vela aromática, etc.
Otra alternativa es iniciar el día haciendo algo que te aporte bienestar. Por ejemplo, meditando, repitiendo un mantra que te motive, escuchando tus canciones favoritas, dándote un baño refrescante, preparando un desayuno que te guste… ¡Así tu día empezará con una mejor energía!

AUTOCUIDADO

Esta debería ser una ley universal para todos durante todo el año. Está genial saber cómo volver a la rutina gestionando el proceso correctamente, pero no pierdas de vista que, dentro de ese proceso, también hay que encontrar el momento para centrarnos en nosotros mismos. 

¿Qué te han parecido estos tips sobre cómo volver a la rutina? Aplícalos y descubrirás que no es tan horrible como pensabas hace unos días. La vida implica constante cambio y evolución, y debemos estar preparados para afrontarlo. ¡Mucho ánimo con la vuelta!

 

#TuAgenteCaser

 

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